Regidora Comisionada en Policía y Prevención del Delito solo de florero
El trabajo -si así se le puede llamar- de la regidora cuarta de Morena comisionada en Policía y Prevención del Delito no ha generado ningún resultado para la disminución de la violencia en Poza Rica.
Poza Rica, Ver.- A 20 meses de haberse iniciado la actual administración municipal, la labor de la regidora cuarta, Marisol Hernández Moreno, ha estado marcada por una serie de decisiones que han suscitado críticas contundentes.
En lugar de priorizar estrategias efectivas para abordar los desafíos de seguridad en la ciudad, ha canalizado gran parte de su tiempo en promocionar a su amigo Emilio Olvera, delegado regional de programas asistenciales conocidos como apoyos sociales, a través de publicaciones en redes sociales.
La repartición de pelotas y la organización de eventos infantiles, aunque bien intencionados, no contribuyen a disminuir los índices delictivos en la localidad.
En vez de liderar un equipo multidisciplinario para idear y ejecutar estrategias contundentes que alejen a la población de las tentaciones del crimen organizado, la regidora ha priorizado actividades que, si bien pueden ser consideradas populares, carecen del impacto necesario para resolver los problemas de seguridad que afectan a la comunidad.
En este sentido, se pone de manifiesto la falta de enfoque en soluciones reales y efectivas para abordar la problemática de la ciudad.
Además, Hernández Moreno tampoco ha expresado su posición sobre la carencia de dirección en la policía municipal, ni ha manifestado una postura en relación con la necesaria evaluación en la selección del personal o la oportuna designación de un comandante con un mandato de al menos 1 año en el puesto.
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Es esencial que las figuras de representación pública, como la regidora cuarta, se comprometan a trabajar de manera constructiva y enfocada en los retos apremiantes de la comunidad.
La seguridad es una prioridad fundamental y requiere de estrategias bien pensadas, respaldadas por profesionales y basadas en el conocimiento y la experiencia.
La ciudadanía espera un enfoque más proactivo y comprometido en la búsqueda de soluciones que tengan un impacto real en la reducción de la delincuencia y el fortalecimiento de la seguridad en la ciudad.
