Trabajo infantil: una constante en Poza Rica

Las crisis económicas y sociales tienen muchos efectos en la población. Una de las principales repercusiones en la niñez es el trabajo infantil, el cual remite directamente a la dificultad de los menores para asistir a la escuela al mismo tiempo que influye en el deterioro de la salud y la integridad física y social.

Dichos factores vulneran los derechos infantiles estipulados en la Convención sobre los Derechos de los Niños (CDN), tratado internacional que se centra en los derechos de los niños, niñas y adolescentes menores de 18 años.

Los 54 artículos que componen la Convención recogen los derechos económicos, sociales, culturales, civiles y políticos de toda la infancia.

Su aplicación es obligación de los gobiernos, pero también define las obligaciones y responsabilidades de otros agentes como los padres y madres, profesores, profesionales de la salud, investigadores y los propios niños y niñas.

Organizaciones no gubernamentales y defensores de los derechos humanos han destacado el incremento del trabajo infantil en Veracruz hasta de un 40%. Poza Rica no es la excepción, basta ver cruceros, mercados, lavaderos de autos, hay menores trabajando, incluso, en obras del ayuntamiento.

Y es que la autoridad municipal de Poza Rica no supervisa condiciones laborales de sus proveedores.

En la observación de los avances de diversas obras públicas en Poza Rica se descubrieron irregularidades en las condiciones laborales de trabajadores contratados por proveedores de servicios del ayuntamiento. En al menos una obra fue detectado un menor haciendo trabajos de albañilería. Cabe destacar que al hacer una indagatoria se estableció que no sabe si cuenta con afiliación al Seguro Social, recibiendo pagos en efectivo sin el recibo correspondiente.

Es preciso mencionar que la inclusión del trabajo infantil se relaciona con bajos ingresos familiares, bajas expectativas en relación con la educación o incluso problemas de salud de los padres o tutores.

Referente Internacional

Tareas infantiles: UNICEF no se opone a que los niños y niñas trabajen. La participación de los niños, las niñas y los adolescentes en un trabajo –una actividad económica– que no afecte de manera negativa su salud y su desarrollo ni interfiera con su educación, es a menudo positiva.

Trabajo infantil: El trabajo infantil es un concepto más limitado que se refiere a los niños que trabajan en contravención de las normas de la OIT que aparecen en las Convenciones 138 y 182. Esto incluye a todos los niños menores de 12 años que trabajan en cualquier actividad económica, así como a los que tienen de 12 a 14 años y trabajan en un trabajo más que ligero, y a los niños y las niñas sometidos a las peores formas de trabajo infantil.

Entre ellas se encuentran la esclavitud, el reclutamiento forzado, la prostitución, la trata, la obligación de realizar actividades ilegales o la exposición a cualquier tipo de peligros.

Transcurre un año de buenas intenciones en Poza Rica.

Ha transcurrido más de un año en la actual administración que encabeza el alcalde Fernando Remes Garza, entre desfiles y festejos del DIF municipal para los niños ya sea por la llegada de los Reyes Magos, el festejo del Día del Niño, la repartición de pelotas en las colonias como parte del programa “Policía Amigo” o como en la última sesión abierta de Cabildo, realizada casi al finalizar el 2022 en donde por fin se abordó el tema del programa municipal de protección a menores.

En dicha sesión la regidora novena Martha Irene Vargas Álvarez, comisionada en Niñez y Familia, se pronunció por la aprobación de un convenio con la Asociación Visión Mundial de México (World Vision) el cual – en palabras de la edil – permitirá el fortalecimiento de acciones en favor de la atención, defensa y protección de Niñas, Niños y Adolescentes del municipio.

Lo preocupante del asunto es el tiempo transcurrido -12 meses- para iniciar apenas la planeación de un manual para la atención y defensa de la niñez pozarricense, delegando la responsabilidad a una fundación externa al municipio. Es decir, destinar recursos públicos para completar un trabajo que es obligación de las comisiones municipales y del DIF.

En este contexto, la falta de conocimiento de los datos estadísticos municipales sobre el trabajo infantil o simple falta de interés en el tema por parte de los comisionados, da como resultado una tardía respuesta a un problema que se viene arrastrando desde hace años en Poza Rica.

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De igual forma, la titular de la regiduría novena de Poza Rica no ha emitido algún reporte sobre el estado del Desarrollo Económico del municipio, comisión que también ostenta y que, en el primer informe de gobierno de 75 páginas, solo se hace mención en poco más de 2 cuartillas a una serie de eventos y visitas de funcionarios estatales y federales, pero cifras en materia de economía en concreto no hay nada.

Por cierto, desde junio del año pasado, en el marco del Día Mundial contra el trabajo infantil, el DIF municipal anunciaba a través de su titular Diana Remes Oropeza, acciones para la disminución y erradicación del trabajo infantil en el municipio, sin embargo, parece que las acciones se quedaron en el discurso y tuvieron que transcurrir otros 6 meses para que se retomara la iniciativa, en esta ocasión, para la planeación de un manual.

Ojalá que el referido texto sea elaborado -y sobre todo aplicado- antes de que concluya este cuatrienio por el bien de niñas, niños y adolescentes trabajadores pozarricenses.